La Sinagoga del Conde
Revista Billiken 1944
Enclavada
en la parte más airosa de una moderna urbanización del Este, luce sus líneas
impecables la Sinagoga Sefardí de Caracas, de arquitectura románico-renacentista,
erigida por la comunidad judeo-española residente entre nosotros, la cual, en este mismo año ha conmemorado el
cincuentenario de su fundación.
La
colonia sefardí, ya en definitivo arraigo venezolano, se ha caracterizado por
la laboriosidad de sus componentes, así como por sus indiscutibles méritos en
sociabilidad y franca solidaridad hacia el pueblo de Venezuela que ya es patria
de esos hebreos que hablan nuestra lengua y descienden de aquella vieja cepa
española que dio hombres de la talla de Maimonides el más saabio de su
época, de Yuda Ha-Levi, el inspirado
poeta, de Jacobo “el de las leyes”
consejero de Alfonso X, el sabio, cerebro famoso de las Sietes Partidas,
de Luís Ángel, el financista de Colón para el descubrimiento de América,
tesorero de la reina Isabel la católica.
La
Sinagoga de El Conde, como se le conoce, conjuga armónicamente la esbeltez de la
forma con la adusta sencillez de la arquitectura. Su interior, el gran salón de
oraciones a todo lo alto de la bóveda, la bordea una estrecha galería. Hacía el
fondo, sin otro adorno que la
columnillas salomónicas que sustentan el sacro tabernáculo de los pergaminos de
la Ley de Moisés, una sobria silletería de caoba asiento del consejo de los
ancianos. En el frente , hacía el centro,
la tribuna del oficiante con la misma discreción de lujo sin ostensibles
de brillante decoración disimulada por el rojo terciopelo donde apoya el oficiante el libro de los ritos y el rollo de la Ley.
Los asientos para los fieles dispuestos en fila detrás de la tribuna y frente al tabernáculo, completan el
decorado del templo donde los hijos de Israel veneran al Dios de sus mayores,
en la lectura de la Biblia, el libro de su historia, el libro de los libros,
sublime compendio que encierra la vida de un pueblo que abrió las páginas de la
humanidad.
Honorable
en su más alta expresión, la comunidad que rinde culto a Dios en la Sinagoga de
El Conde, cuente en su seno, entre otros valiosos elementos que le prestan la
fuerza de su juventud y el impulso de sus actividades, un hijo de Caracas
vástago de honorable familia que ha hecho de la bondad un culto. Nos referimos
a Don José Sabal hijo, quién ejerce la Presidencia de la Sociedad Israelita de Venezuela. Propulsor eficiente de cuanto
venga en beneficio de la labor cultural de la sociedad, una de cuyas
finalidades es hacer el bien a todo trance.
Fieles
a este propósito las honorables personas que integran la “Sociedad de Damas Israelitas
de Venezuela” se apuntan en su proficua
labor, puntos que exaltan su personalidad.
Fundada
en el año de 1936 tuvo como base de sus actividades, efectuar un reparto de
canastillas en los establecimientos asistenciales de la ciudad, en los cuales
han invertido desde que les dan derecho a
la gratitud de los hogares venezolanos desde su fundación hasta el presente, la
muy apreciable cantidad de 83.202 bolívares.
Ello en
5943 canastillas grandes, compuestas cada una de las siguientes piezas: dos
fajitas, cuatro sabanitas, dos abrigos, tres camisitas, dos cobijas, dos pares de
escarpines, y un vestidito. Es de advertir que la mano de obra queda excluida
toda vez que son confeccionadas por las Damas Israelitas y las materias primas obtenidas
a precios de costo en los establecimientos de los caballeros de la misma
sociedad. El costo de cada canastilla es de Bs.14.
Los
establecimientos de la asistencia social : Institutos “Simón Rodríguez” , “Cruz
Roja Venezolana”, “Hospital Vargas” , “Casa Pre-Natal de Maternidad Concepción
Palacios” y otros centros particulares que han recibido tan hondo beneficio.
La
situación creada para la parte desvalida, motivó la distribución adicional de
100 canastillas entre la gente proletaria, a partir de 1943; y sin alterar el
plan primitivo, ni disminuir sus envíos permanentes ha distribuido hasta la presente,
1.300 canastillas.
Da una
idea de la nobleza de alma que priva en las Damas acerca de las cuales nos
referimos, de hecho de estar distribuyéndose en la actualidad 100 canastillas mensuales
en la casa de Maternidad y 40 en casas particulares.
Esta
actitud y la que observan los caballeros que integran la Sociedad Israelita de
Venezuela, dan una idea de cómo comparten el producto de su trabajo honesto y
edificante, los caballeros israelitas, con personas que no importa su raza ni
credo. Porque su móvil es hacer el bien.
Antes de su demolición en noviembre de 1954 |
1936 - Colocación de la primera piedra de la que sería conocida como la sinagoga de El Conde, en la urbanización de ese nombre, en el centro de Caracas.
1939 - Inauguración de la sinagoga de El Conde.
1954 - Firma de la cesión del terreno de la sinagoga de El Conde la que posteriormente es demolida para dar paso a la Avenida Bolívar. Adquisición de un terreno en la urbanización Maripérez para la construcción de la nueva sinagoga. Los rezos se trasladan a una casa situada en El Conde
Al conocer que su Sinagoga sería demolida, los Judíos sefarditas de Caracas se resistieron al principio, pero ya se han resignado y proyectan reconstruir su iglesia en el mismo barrio" - Elite mayo 1954- fue demolida en noviembre de 1954 y mudado los rezos temporalmente a otra casa en la misma Urbanización, hasta que se construye el nuevo templo en Maripérez
1939 - Inauguración de la sinagoga de El Conde.
1954 - Firma de la cesión del terreno de la sinagoga de El Conde la que posteriormente es demolida para dar paso a la Avenida Bolívar. Adquisición de un terreno en la urbanización Maripérez para la construcción de la nueva sinagoga. Los rezos se trasladan a una casa situada en El Conde
Al conocer que su Sinagoga sería demolida, los Judíos sefarditas de Caracas se resistieron al principio, pero ya se han resignado y proyectan reconstruir su iglesia en el mismo barrio" - Elite mayo 1954- fue demolida en noviembre de 1954 y mudado los rezos temporalmente a otra casa en la misma Urbanización, hasta que se construye el nuevo templo en Maripérez