El Cojo Ilustrado : Exequias del General Páez en Nueva York en marzo de 1888

José Antonio Páez 

Según la prensa americana de la época murió en su domicilio de N. York, modesta casa de la calle 20, número 24, a consecuencia de una neumonía por enfriamiento brusco en cabalgata por Parque Central. Tenía 83 años. Sus funerales fueron sencillos y humildes para un hombre que fue la figura central en nuestra guerra de independencia. Aunque desaparecido físicamente, su imagen y pasión venezolanista sigue siendo inmortal en estos tiempos a pesar de los arteros ataques injustos y falsos que con inusitada frecuencia provienen de las más altas posiciones del poder ejecutivo. Durante su mandato presidencial fue el gran promotor de los llamados Códigos de Páez, a saber: Códigos Civil, Penal y de Comercio, además de los Códigos de Procedimiento Civil y Criminal. Y es sabido que el General durante sus periodos presidenciales fue un gran civilista, y despojándose de su glorioso uniforme militar vistió el traje civil y supo imponer el imperio de la leyes ante las armas. Por ello afirmo que su pensamiento y acción deberían mantenerse en la actualidad como una contribución inmortal a la paz y justicia de los pueblos. Con razón, los más agudos analistas de nuestra realidad social, no le han regateado a Páez el calificativo de “verdadero hombre de Estado” entre ellos Gil Fortoul, Vallenilla Lanz, Augusto Mijares y José Martí. Según expresó su adversario Antonio L. Guzmán “la época de Páez fue la época de la prensa libre”. Y continuaba diciendo “ los periódicos de Venezuela en esa época son dignos de la Nación más libre y civilizada de la tierra.

Dr. Rafael Arteaga Romero

Salida del  féretro - Plaza del Central Park-  Calle 59 Oeste

La banda marcial y la Guardia de honor, esperando el féretro
en el embarcadero de la Calle 26 Este 

Honores militares al féretro en el embarcadero 

Embarque del féretro en el remolcador
para ser conducido a bordo de la Fragata

Embarque de los restos en la Fragata Americana
"Pensacola"  

Texto publicado en Quinto día por el Dr. Rafael Arteaga Romero. 

Imagenes del Cojo Ilustrado.