domingo, 28 de abril de 2019

EL CENTENARIO DE GUILLERMO JOSÉ SCHAEL

Por María F Sigillo
Caracas en Retrospectiva



Para nadie es un secreto que nuestro país vive uno de sus más duros momentos históricos. Puede decirse que no estamos para fiestas. Es verdad. Pero también lo es que Venezuela necesita empinarse sobre  sus más sólidas reservas morales para seguir adelante y superar con creces esta etapa. No habrá otra manera de reconstruirla que la de contar con el testimonio e coraje de los hombres y mujeres que nos hicieron República con el gran aporte de una civilidad convertida en herencia valiosa. Esto es lo que representa Guillermo José Schael, a quien le celebramos sus primeros años, vivo en la memoria de los venezolanos y, particularmente, los caraqueños.

Laboró por casi medio siglo en el Universal de Caracas, hasta que cedieron sus fuerzas físicas. Día por día, “Brújula”, el nombre de su muy leída columna, sintonizaba con la vida cotidiana de sus miles de lectores a través de una variedad de temas que los identificaba con un autor de prosa pulcra, respetuosa y cordial.  Las generaciones que tuvieron la fortuna de crecer con sus textos,  cuando una pregunta y explora, asoman afabilidad y sensatez en sus juicios. Las nuevas generaciones, las que sólo han conocido ésta ya tan difícil como injustamente prolongada época, deben conocerlo. A cien años de su nacimiento, es mucho lo que les dirá don Guillermo José Schael sobre el porvenir necesario de conquistar.

Amó a su ciudad natal con la fuerza de un claro sentimiento, pero también con la del investigador que, además de dejar el testimonio personal de su cotidianidad, exploraba los viejos testimonio tardando horas en los grandes archivos. Cronista de Caracas tiempo después, desde que inicia sus labores profesionales a mediados de los años cuarenta del siglo pasado, hizo un inmenso acopio de las más remotas vicisitudes de la modesta capital que tuvimos. No era extraño a sus rincones más escondidos y sus gentes, testigo excepcional del crecimiento que experimentó a la sombra del petróleo, siempre presente el riesgo de borrar las tradiciones que la hicieron posible.

Le apasionaban los automóviles y son incontables las crónicas dedicadas al fenómeno de una ciudad que abandonó sus estrechas calles a favor de las grandes avenidas y autopistas. Y, rumbo al Cuatricentenario de Caracas, propuso un Museo del Transporte que más tarde fundó, materializándose al lado del Parque del Este. Todo tipo de vehículos de tierra y aire, se dan citar en un lugar que, muy a pesar de los apremios, es cita todavía para la ciudadanía que busca una sana recreación, incluyendo las tertulias dominicales y amigos que reflexionan sobre el pasado, pero con una inmensa vocación de futuro.



Postal  en el Libro  Caracas de Siglo a Siglo 




Caracas la Ciudad que no vuelve 

Centenario de Guillermo José Schael


Este domingo 28 de Abril de 2019 en el Museo del Transporte


viernes, 26 de abril de 2019

... y Venezuela también !!!


Caracas te celebra
Por María F Sigillo
@msigillo


La crónica  siempre vistió mi hogar. Los cuentos infantiles  que recuerdo eran justamente las columnas que mi padre inmigrante leía, tratando tal vez de perfeccionar el castellano y aprender de la ciudad que lo recibió con bondad. Era, por entonces,  El Universal o El Nacional, y  las revistas Momento, Elite, etc.  Como buen barbero no podía faltar en su local.  Luego de la jornada, los llevaba a casa y, con la precisión  de un cirujano que en ningún barbero puede fallar,  recortaba y me regalaba los artículos para ir creando mi  hemeroteca personal.   

Por ello, la  figura de Don Guillermo siempre ha estado presente en el hogar, en escuela, en los paseos, y en la mirada que siempre doy a cada rincón de Caracas.

Hace poco leí en  "70 años de Crónicas en Venezuela " (Banesco, 2015)  un párrafo que comparto: " La crónica es un género de resistencia. Un género a contracorriente. Porque más allá de cuánto haya de legítimo o no en los señalamientos que se hacen al ejercicio del periodismo, la crónica, tanto en Venezuela como en Hispanoamérica, ha mostrado a lo largo de las últimas décadas una fuerza y una constancia sorprendentes."

Don Guillermo José Schael , su Museo del Transporte,  sus libros, sus artículos de prensa que durante 45 años ininterrumpidos mantuvo a través de la columna "Brújula" en  EL Universal,  son un ejemplo de esa resistencia, de esa constancia sorprendente que de manera sencilla y a pesar de las actuales circunstancias, nos permite seguir soñando y trabajar por una  Caracas posible, ciudadana, amada.

Caracas en Retrospectiva celebra y honra a Guillermo José Schael  y por ello ha solicitado a la Asamblea Nacional,  a través del Presidente de la Comisión de Cultura,  el merecido reconocimiento institucional, en nombre de la familia retrospectiva, los caraqueños de ayer, de hoy y los que vendrán,  de la sociedad civil en general. Don Guillermo es parte de nuestro patrimonio espiritual y no sólo de la ciudad capital, sino de toda Venezuela.
@CaracasRetro


Don Guillermo José Schael
Blog Museo del Transporte 




jueves, 18 de abril de 2019

CRÓNICA DE LA SEMANA SANTA


El Universal 19 de abril de 1919

“Con fervor sincero, que corresponde à la tradición religiosa del pueblo de Caracas, fué celebrada este año en la ciudad la Semana mayor. Los templos estuvieron plenos de fieles durante las diversas ceremonias conmemorativas de la pasión y Muerte del Redentor. Las calles no cesaron de ser transitadas en estos días, en los que el orden más perfecto, cónsono con la cultura de nuestro pueblo, reinó en todos los actos, cuya descripción pasamos a hacer brevemente.

El Miércoles Santo está caracterizados en Caracas por la devoción del Nazareno de San Pablo. Así que desde el alba la ciudad invadió el templo de Santa Teresa, donde los artesanos dedicaron horas de música por la mañana y por la noche, dirigidas por el señor Pedro Elías Gutiérrez; los comerciantes dedicaron las horas de la tarde, bajo la dirección del señor Carlos Montero.
Se pronunciaron tres sermones.

En Santa Rosalía, fue muy lucida la festividad realizada por la asociación de damas que preside la señora Emilia Núñez de Coll. La orquesta estuvo bajo la dirección del señor Pedro Arcílagos.
Varias señoras y señoritas obsequiaron al Nazareno con cánticos de pasión.


El Jueves Santo, el Ltimo. y Rvmo. señor Arzobispo doctor Rincón González celebró la pontifical en Catedral, hizo la consagración del óleo y los del crisma. Asistieron los Ministros del Despacho Ejecutivo presididos por el de Relaciones Interiores general Ignacio Andrade; el Gobernador del Distrito  Federal; el Secretario General de la Presidencia; el Secretario de la Gobernación; la Corte Federal y de la Casación y demás funcionarios nacionales, el general Pedro Alcántara Leal, Jefe de la 1ª Brigada y la oficialidad franca de servicio; el señor prefecto, el Concejo Municipal, los Tribunales y empleados municipales.

Actúo una buena orquesta dirigida por el señor Ignacio Bustamante, Maestro de Capilla.
En la procesión del altar al monumento la Barda Marcial ejecutó la marcha "Llanto y ternura" de su Director, señor Gutiérrez.

En los demás templos de la ciudad se ejecutaron los oficios del Jueves Santo. La llave simbólica del Sagrario del Monumento condecoró a las siguientes personas: 
Catedral, general Ignacio Andrade, Ministro de Relaciones Interiores; Santa Teresa, Francisco de P. Hernández; Altagracia, doctor Pedro V. Azpurúa; Candelaria, doctor Rafael Acevedo; Santa Rosalía, doctor Juan de D. Villegas Ruiz; San Juan, Juan L. Cordero;  La Pastora, Agustín Binda; San José, Esteban A. Barrios; San Francisco, prcabítero doctor Elías Bello; Las mercedes, Tomás Reyna; Santa Capilla, Elías Borges Santamaría; La Trinidad, José L. Rodríguez; Corazón de Jesús, doctor Arnaldo Morales; María Auxiliadora, Carlos Guevara; Padres Agustinos, doctor Ernesto Delgado; Santa Rosa, presbítero doctor Reinaldo Esculpi.

En la  tarde, se hizo la ceremonia del Lavatorio en la Catedral, Las Mercedes, San José, Asilo de la Providencia. Las Terceras órdenes y Cofradías salieron en cuerpo á rezar las Estaciones. 
En otros templos, se practicó por la tarde y por la noche, un ejercicio en homenaje a la Eucaristía, cuya institución se conmemora este día.

Terciarios y cofrades velaron toda la noche, por turnos, en San Francisco y en Candelaria; en tanto que en sus hogares, las señoras y señoritas de la Adoración Perpetua de la Santa Capilla se unían por turnos de media hora a los misterios de la noche de oprobios de la Redención del género humano. 

El Viernes Santo en Catedral y en los otros templos fue adorado el Leño de la Cruz.
En Catedral ofició el Lltmo. y Rvmo.  Señor Arzobispo con ornamento negro y mitra blanca y asistió personal gubernativo como el día anterior.

Actúo la orquesta del señor Bustamante. la Banda Marcial ejecutó el oratorio de Perosi, La pasión de Cristo, y el "Popule Meu" y "El Inflamatus" de Rossini, instrumentador por el Director; y las obras originales de éste, "Tristis anima" y marcha "El Nazareno".

En la tarde, se hizo el solemne ejercicio de las Sietes Palabras en Las Mercedes, Santa Rosalía, Corazón de Jesús y san Juan; se rindió homenaje al Santo Cuerpo de Nuestro Señor en la Catedral, San Francisco, La Pastora, San José, La Trinidad y Santa Teresa; y á la Soledad y Dolores de la Santísima Virgen, en Altagracia, Santa Capilla, San Juan,  Siervas del santísimo Sacramento, Padre Agustinos, María Auxiliadora, Rincón del Valle, Santa Rosa. 

Así ha celebrado Caracas, piadosa y culta, el triduo de la Muerte del Salvador del Mundo, con un fondo efectivo de piedad, con los recursos de la oración sagrada, del divino arte, con el buen gusto para la combinación de flores y de luces dieran el resultado apetecido. 

Las autoridades, los rectores de las Iglesias, los fieles, es decir, los ciudadanos y las damas, han puesto de su parte para que todo se hiciera con piedad y orden, en medio de la multitud, y Caracas cumpliese con la fe de sus mayores, y conservase sus costumbres cristianas."