domingo, 26 de abril de 2015

Cantinflas saluda a los Venezolanos




“Mientras Garrido tiraba unas fotos, en el patio de caballos, al llegar “Cantinflas” al Nuevo Circo, nos hizo el héroe  las graves manifestaciones siguientes: 
“-Pues, verá. Mi idiosincrasia relativa al Arte de Pepe- Hillo, se diluye en el protoplasma  de la hipotenusa … y si entendemos por tal, pero claro…usted me comprende,  ¿Verdad? Además, si tomamos  por término medio… a propósito ..  usted ve la situación  del macho que se va a jugar la vida como yo,  ahora ahí adentro  .. ¿ qué le parece manito?  ¿Por qué no sale otro?  ¿Usted, por ejemplo?  ¡ Ahí está el detalle… ¡ En fin, lo de mis pantalones, es cosa muy mía, unidos a mis carnes por alfileres invisibles.. En cuanto a la desintegración de los crepúsculos, ya digo yo en el “Bombardeo Atómico” pero, no ahí no, eso no, usted ya como subiéndose conmigo…” 
Y así, en este plan explosivo, incongruente y desquijarnarte, [sic]  Mario Moreno, inició el paseíllo, echando las piernas en un paso de a  metro, cuando clarineó el tararí de la Presidencia. 
Sus heroicidades taurómacas, entre brincos, desequilibradas acrobacias y originales posturas, colmaron de alegría de chicos y de grandes que, en tres cuartos ocupó la Plaza.  La gente se torció, se retorció y se carcajeó, ante las interpretaciones hilarantes del magnífico cómico. Cuanto hizo, o una parte de ello, lo recogió Garrido en las fotos que ilustran este breve comentario. 


“Por intermedio de la Revista ELITE, el pueblo venezolano con todo mi afecto y con toda mi estimación un abrazo, deseándole lo mejor de lo mejor, y que en esa forma y en cualquier otra forma se encuentre como debe encontrarse , perfectamente bien.  Como dije antes, mis mejores deseos  y todo lo que hay,  y si hay mejor todavía.  Para ustedes con todo mi cariño”.- CANTINFLAS. 

Fuente: Elite 1953
Don Eduardo

Una retrospectiva de Santa Mónica


La presente imagen fue un aporte al grupo de facebook Caracas en retrospectiva II por 
Andrés Orzaez Conesa, y fue acompañada del siguiente texto : 

"Esta foto es del año 1957. Tomada en la Avenida Manuel Díaz Rodríguez en Santa Mónica. A la derecha de la foto se puede ver parte del Paseo Los Ilustres, el puente del distribuidor Nueva Granada (pero sólo el puente) y la zona de la Bandera totalmente despejada. El edificio es el Bolívar, aun existe pero la fachada ahora es diferente por todo el entramado de rejas que tiene."

La avenida es en dirección bajada hacia el Guaire. Ese es precisamente el último tramo de la avenida. Pero hoy en día desde ahí tampoco se ve el distribuidor porque construyeron luego hasta llegar a la esquina." 



domingo, 19 de abril de 2015

19 de abril de 1810



De acuerdo a lo referido por Pedro Cunill Grau (*), a comienzos del siglo XIX estaba totalmente consolidado el emplazamiento poblacional de Caracas. Al norte, El Ávila (luego quiso cambiársele el nombre de su cumbre, Silla de Caracas, por Monte de Indpendencia); al sur, llega hasta las riberas del río Guaire; y los límites de oriente y occidente, por las quebradas Anauco y Carota. Ciudad aparentemente emplazada en terreno sólido, sin que le alarme temblores como los dos del día domingo, 11 de junio de 1809.

Desde Caracas en Retrospectiva, intentamos imaginarla el 19 de Abril de 1810, nucleada por la Plaza Mayor, irradindo al resto.  Las principales edificaciones públicas eran el Ayuntamiento, la Prisión Real, la Catedral con prisión eclesiástica y cementerio al costado, el Palacio Episcopal, la Casa Real Audiencia, Colegio y Universidad con la Capilla de Santa Rosa de Lima, Guardia de Principal y el Convento de las Religiosas de la Concepción. En el centro, habitan los mantuanos de mayores recursos (Conde Tovar, Marqués del Valle de Santiago, Marqués de Casa León, entre otros), cercanas las sedes de la Tesorería, el Consulado, Estanco y Depósito de Tabaco, Residencia del Capitán General, Coreo, el Teatro, la Posada de El Ángel y almacenes de lujo, Conventos como el de San Francisco, Carmelitas Descalzas y de los Dominicos, Iglesia de San Jacinto y de San Mauricio, con algunas plazuelas. Hay  barrios caraqueños consolidados y contiguos: Altagracia, Merced, San Plabo y San Felipe Neri, y otros periféricos y en expansión como Santa Rosalía, La Pastora, La Trinidad, La Candelaria, San Lázaro y San Juan. Y, entre éstos, ubicamos la conexión con otras localidades, porque en La Pastora está el camino a La Guaira, San Juan a La Vega, Santa Rosalía a El Valle, La Candelaria a Sabana Grande, Chacao y Petare. No están enumeradas las calles y casas, demostrando un desorden toponímico.

Frecuentemente, suponemos que los consabidos hechos del 19-A no tardaron en conocerse. Partiendo de lo referido por Cunill Grau,  considerando que Caracas era el punto de encuentro político y administrativo de entonces, conformada y rodeada de grandes haciendas, los 47 mil habitantes que tenía  se enteraron de lo acontecido con el Capitán General, tardíamente. Quizás hasta que llegó la misma guerra, declarada la Independencia. Analfabetismo y dispersión que hoy no imaginamos. No había noticiero radial ni televisivo y, menos, las redes sociales. Buena parte de la población ni sabría el nombre del alto funcionario colonial desplazado. No todos andaban el centro de la ciudad que no facilitaba la transportación, resultando costosa. Por cierto, es de suponer el lujoso atuendo de los grandes funcionarios reunidos en cabildo el 19-A, motivo de distinción social por aquella época, al igual que el intenso calor en la ciudad (claro, indudablemente mas fresca al correr abril de 2015).

(*) Pedro Cunill Grau. "Geohistoria de la Caracas insurgente 1810-1812", Archivo General de la Nación - Centro Nacional de Historia, Caracas, 2012.

La Imagen Es de Jacky Du Jonca (Elite, Caracas, nr. 1281 del 22/04/1950)

miércoles, 8 de abril de 2015

Teatro del Este


El arquitecto José Miguel Galia en el Conjunto Torre Polar - Teatro del Este. Caracas.



“Se ha inaugurado frente a La Plaza Venezuela, el gran Teatro del Este que el Doctor Lorenzo Mendoza Fleury le da a Caracas, su ciudad nativa.

Es satisfactorio ver cómo la iniciativa particular secunda la labor que realiza el Gobierno Nacional para embellecer y modernizar la ciudad que tiene el orgullo de ser la cuna del Libertador del mundo colombino, y de otros  varones que le secunden  en la obra emancipadora.
Caracas veía dentro de su desarrollo urbanístico la construcción de salones para proyección de películas  cinematográficas muy modernas y capaces para el cometido, pero se lamenta de que el Teatro Municipal construído por el Presidente Antonio Guzmán Blanco, cuando la población capitalina no pasaba de los treinta mil habitantes, no fuese sustituido por otro de mayor magnitud, en un lugar más fácil para los concurrentes. Existe el Nacional construído en la administración del General Cipriano Castro, que debido a su falta de acústica nunca pudo llevar su cometido con la amplitud deseada.
Ahora, y debido a un venezolano ciento por ciento, (..) pues no hubo temporada que se realizase en el finado Teatro Caracas destruido por un siniestro en 1918, en “Calcaño”  y el “Olimpia” donde no estuviese como espectador  Simón Lorenzo Mendoza, con el Doctor Razetti y su honorable esposa doña Luisa Guardia, el doctor Emilio Ochoa y señora, don John Boulton y señora, Míster William H Phelps y señora y otros amantes del teatro que siempre dieron prueba de ello. 
El Teatro de Simón Lorenzo, reúne condiciones de confort, acústica, amplitud, situación topográfica en relación con el ensanche de Caracas, y lo que hay que tener para mantenerlo en el cartel mientras el público se acostumbra a visitarlo. 
Mendoza nos ha dicho que allí actuarán compañías de ópera para lo cual abrirá abono;  caso de cubrirse satisfactoriamente  procederán en consecuencia. Alta comedia, zarzuelas, Operetas, recitales y otros espectáculos que erradiquen en lo más hondo posible el fantasma del cine. 
El estreno del Teatro del Este fue prestigiado por la presencia del Presidente de la República Coronel Marcos Pérez Jiménez y su señora esposa;  Ministros del Despacho Ejecutivo, Gobernador del Distrito Federal, Secretario de la Presidencia y otros elementos del gran mundo político, diplomático y social de la Capital. 
Los eternos inconformes critican detalles del Teatro del Este fáciles de corregir, pero por ello no habrá que inquietarse Lorenzo Mendoza, que acaba de hacerle el gran gesto de darle al moderno  Caracas el Teatro digno de ella. 
Por ello lo felicita muy sincera y cordialmente.”
           

Imágenes aportada por Calachica Carlos 






Imagen tomada del grupo Retrospectiva Sala de Cines ( facebook) 

Fuente: Transcrito de Billiken 1955
por CER
Revista Elite 1955

Revista Elite 1955




sábado, 4 de abril de 2015

Los Judas de Semana Santa

“Domingo soleado y rumoroso! Alegría de los pueblos tristes de mi tierra…EL azul escondido del cielo de este día claro y luminoso, parece gritar a voces que Cristo a resucitado. La campanita cristalina de la pobre iglesia de aldea, con sus paredes escaladas, su techo sin cielo raso en el que se cruzan los gruesos listones de madera con un tramazón de cañas amargas y barro que sostiene las tejas coloradas, ha anunciado muy de mañanita el milagro repetido de todos los años de la Resurrección del Hijo de Dios.

El trágico Nazareno de vestiduras moradas y rostros chorreante de sangre pintada, con su corona de espinas y su gesto de angustia, ha sido guardado otra vez bajo la blanca cortina de muselina, junto con el sepulcro del señor que tanto brillo dio a la procesión del viernes santo. Los fieles que llamados por la voz de plata de la campanita han ido acudiendo al requerimiento de la iglesia, han abandonado el hosco gesto de los días en que se revivía la pasión y muerte del dulce Jesús, para adoptar una expresión alegre de día de fiesta, que se reflejan en los limpios trajes domingueros,  de dril planchado de los hombres (..) 

La misa del domingo ha reunido entre los muros de la pequeña iglesia, a todos los habitantes del pueblo. A la salida, los mozos esperan en dos filas junto a la puerta, el paso de la chiquilla airosa a quién el encaje de andaluza sirve de lindo marco afiligranado para los ojos renegridos y  la boca pulposa y húmeda. Van desfilando las mocitas del pueblo, sonreídas y satisfechas ante el piropo murmurado al pasar. En la plaza se forman los grupos amables y conversadores para el paseo y el comentario. Pero es en la tarde, cuando será la verdadera fiesta.  Fiesta de grandes y chicos, donde corre el aguardiente y se quema el Judas que se ha venido preparando desde hace varios días, con todos los requisitos de la tradición. 

El boticario del pueblo suministró una vieja colchoneta que ya no servía para que se aprovechara el algodón y el forro para formar el cuerpo de Judas. Naturalmente dentro del cuerpo se colocaron innumerables triquitraquis y garbanzos, así como una rociadita de pólvora seca para que el Judas ardiera bien.  En cuanto al bodeguero su aporte fueron los triquitraquis y cohetes que estallarían en medio de la quema. 

Para el traje se recurrió a Don Fulano, el más acomodado del pueblo, quién ofreció un flux viejo que vestirá el muñeco. Los zapatos y la pajilla se consiguieron con otros, así como la camisa y la  corbata.  Finalmente, con una máscara cocida sobre la almohadilla que hace las veces de cabeza, está ya listo el muñeco. Solo le falta ahora lo que el ingenio popular  quiera añadirle. Una flor en el ojal, un gran letrero que dice: “Adiós, mi hermano” y un periódico en la mano y todos aquellos que contribuyan a asemejarlo lo más posible al más feroz de los enemigos del pueblo  o al más tonto de sus moradores. 
Ya está listo el Judas. Y ha llegado la hora del desfile. En un automóvil desvencijado, en una carreta, o caballero en un burro, es paseado por las calles principales del pueblo.   
Por un cortejo compuesto de fiesteros y uniéndose los chiquillos de los alrededores donde quiera que va el cortejo. Con las respectivas paradas ante los botiquines y pulperías en la que los componentes del cortejo se detienen el tiempo suficiente para “echarse un palito”. También se detiene ante las casas de los habitantes más acomodados, para que estos puedan hacer su contribución a la fiesta. 

Quién da diez bolívares, quién da dos, cada uno lo que pueda. En la tarde el dinero recogido se convertirá en aguardiente y en la alegría de unas horas. 

Y allá va la caravana!.. En las esquinas los mocitos que charlan comentando la última novedad del pueblo, o en voz baja, salpicada de malicias, repiten el último chisme  de la vecindad, se quedan contemplando el muñeco grotesco que los mira al pasar con sus grandes ojos vacíos. 

- Fíjate vale, se parece al coronel Pérez….

El coronel Pérez fue el último Jefe Civil que tuviera el pueblo en vida de Gómez, y allí se le recuerda como causante de todas las miserias y todos los males de la pequeña aldea.  El Coronel Pérez se llevó del pueblo “hasta las perillas de las puertas”  de la jefatura Civil.  Cuando estaba el coronel  Pérez en el pueblo, ni si quera se podía matar un cochino sin darle su buena parte. El coronel Pérez hizo su querida de la flor más linda del pueblo, aquella Ana María que tenía los ojos negros y dulces y el cuerpo fresco y airoso. De nada le valió a Genaro, el mocito que la amaba, tratar de defenderla.  Genaro fue a parar al Castillo Libertador, acusado de quién sabe qué tenebrosos “complots” contra la causa.  Por eso, el  Judas de esta tarde se parece al coronel  Pérez. Y el pueblo va a darse el gusto de quemarlo alegremente. 

Y el cortejo, que ya ha injerido bastante “palitos, continua su marcha abierta por la bamboleante  figura del muñeco vestido. 

- El Judas!... El Judas!... 
gritan los muchachos corriendo en medio del polvo y el calor del mediodía  para sumarse a la alegre caravana. Y todos los vecinos se asoman  a la puerta para verlo pasar. Las mocitas, muy compuestas, están a la ventana, charlando con los que pasan y con los que se quedan prendidos a los barrotes aprovechando el ambiente de fiesta para decirles la frase atrevida  que las hace sonrojarse un poco.

- Jesús con Usted,  Andrés…. 
- si lo oyera mamá….
- Buen cuidado tuve de  cerciorarme que no andaba por todo esto.
- Esa suegra mía es más templada!....

Una carcajada alegre acoge la salida del mozo. La chiquilla lo mira largamente y después retira la vista para fijarla en el muñeco que pasa. 

- Fíjese, fíjese… se parece un mismo hombre. Jesús!   ¿Va estar muy buena la fiesta? 
- Esplendida! Don Pedro regaló un barril de aguardiente y dos latas de chichas. Crucito ofreció 

venir con los muchachos con todo y arpa… Y como la casa de misia Nieves es tan grande el baile quedará magnifico. Ustedes van, por supuesto, ¿no? 

- Claro, estuvimos a punto de no ir, porque como tu mamá tiene esa puntá tan fuerte, no quería que fuéramos solas. Pero como es en casa de Misia Nieves y ella misma ofreció venirnos a buscar…

- Bueno, yo me despido: ¿No van a ver quemar el Judas? 
- Si, ahoritica vamos. Hasta lueguito. 

Es una extraña costumbre esta de quemar el Judas en la tarde del Domingo de Resurrección. Una costumbre un poco bárbara y mucho pagana, inspirada sinembrago en la tradición católica de las fiestas de semana santa. Una fiesta que tiene un fondo de vindicta pública, de corte de justicia popular. Judas el discípulo traidor que vendió a su maestro por treinta monedas de plata, debe morir todos los años a manos de la justicia popular. Y su muerte debe estar revestida de humillación y de escarnio y ser celebrada después como una fiesta en la que correrá el aguardiente y la satisfacción de la Ley cumplida. Pero Judas en nuestros pueblos, ya casi no recuerda al discípulo de Cristo. Judas se convierte por obra y gracia de la imaginación popular, en la figura más odiada de la aldea, el enemigo público número uno de quién no pudo sancionársele según el anhelo de toda la población y que satisface el deseo de justicia y venganza convirtiéndose en el grotesco muñeco que se hacer arder, entre la alegría de todos los presentes, para escarmiento de futuros malvados. 

Por eso Judas se parece a veces al coronel Pérez o al Dr. García. Por eso, el domingo de resurrección del año de 1936, todos los judas de los pueblos Venezolanos era una representación del General Juan Vicente Gómez.  Es el pueblo venezolano, ese pueblo tantas veces oprimido y explotado, que ejerce simbólicamente su función de justicia y de venganza…        

Fuente: Por Juana de Avila 
Reportaje Elite 1939
Transcrito por Caracas en retrospectiva 





miércoles, 1 de abril de 2015

El Gran Viaducto de Pagüita


“El caraqueño que abandonó su patria chica y vuelve a ella al cabo de tres meses de correrías por tierras extrañas, no encontrará como explicarse el formidable empuje que recibe el país del uno al otro extremo, por obra milagrosa de un Gobierno patriota, responsable y penetrado de todo cuanto significa darle impulso a las corrientes modernizadoras que privan en los conductores de pueblos de más allá de nuestras fronteras. 

Es que están agrupados en torno al magistrado que rige los destinos  de la nación. 

Quién venga a la capital, así del exterior, o de tierra adentro, visite el “Terminal de Pasajeros”, moderno y decente como no lo encontrará en País alguno del viejo ni del nuevo mundo, y entra en Caracas por la Autopista que arranca desde la alcabala de Maiquetía; recorra las “Avenidas Sucre” “Urdaneta”, “Guzmán Blanco”, “Bolívar”, “Miranda”, “Autopista del Este”; visite el “Centro Simón Bolívar”; admire la belleza incuestionable de los parques de la ciudad, uno de los cuales “El Calvario”, supera cuanto imaginarse pueda en materia de decoración forestal, tendrá que convenir Bellis-nolis, en que estamos en plena modernización de Caracas,  cuna ilustre de los Libertadores  del mundo colombino. 

En la mayoría de las obras realizadas en menos de dos años de intenso trabajar, el Presidente de la República Coronel Marcos Pérez Jiménez, está demostrado  clara y categóricamente  de lo que es capaz en beneficio de una Venezuela mejor.

Punto importantísimo que ocupa la atención del Presidente hoy, es la construcción del “Viaducto Pagüita”.

El propósito del Ministro de Obras Públicas, Doctor Bacalao Lara, dejarlo listo para su inauguración en Diciembre próximo. 

Se ha visto y se está contemplando cada día con mayor fuerza la capacidad de los ingenieros venezolanos  en la construcción de las obras que le son encomendadas. De ello han dado buena prueba en la Autopista Caracas-La Guaira, en las grandes vías de comunicación que surcan a Venezuela de un extremo a otro y dondequiera que se han utilizado sus servicios profesionales. 
Con esa misma (..)


Las características de esta nueva arteria de comunicación que habrá de embellecer un tanto a Caracas, son las siguientes: 
Largo total 430 metros, de los cuales 130 corresponden al puente; los 300 restantes para sus dos accesos. A cada extremo habrá  un paso a nivel de 20 metros; su arco central tiene exactamente 90 metros.
En la construcción de este gran Viaducto  se están empleando materiales  y el mismo procedimiento que los dos puentes de la Autopista Caracas-La Guaira; ello es, concreto presentado. 
La anchura del puente  es de 26 metros, distribuidos así: dos para aceras de 3 metros; dos calzadas de 7,25 y una isla central de 1,50 cada una. Han calculado en 4 millones y medio de bolívares el costo total de la obra.
No se le escapará al lector la importancia de esta arteria de comunicación, pues que además de ornamentar  aquel vasto sector de Caracas hará desaparecer totalmente las dificultades resultantes del congestionamiento de vehículos que transitan en la Avenida Sucre. "


Billiken 1954